Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 1-9 “Nuestra misión es atender con sentido humano, prontitud y respeto a la dignidad de cada persona”, expresa la doctora Yojaira del Rosario Citá Leiva, coordinadora del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF- en el Modelo de Atención Integral para las Mujeres Víctimas de Violencia I´x Kem –MAIMI-.La profesional de las ciencias forenses es una de los cinco médicos especialistas del INACIF asignados para auxiliar a la población en la sede del MAIMI, un sistema de atención inmediata e integral creado para dar respuesta diferenciada y efciente mediante la coordinación interinstitucional, con la intención de mejorar los mecanismos de investigación criminal.“Somos un eslabón fundamental en la cadena de servicio, porque aportamos el dictamen pericial que es clave en los procesos. Por ello, hacemos las evaluaciones lo más pronto posible. Trabajamos con empatía y le damos el tiempo adecuado a las personas para que se desahoguen”, destaca la doctora Citá Leiva.Detalla que para cumplir con esa misión están organizados en turnos rotativos de 8 horas, lapsos en los que reciben las denuncias que llegan directamente al MAIMI y también de las fscalías municipales del Ministerio Público –MP- en el área metropolitana. En promedio asisten a 14 personas, aunque los fnes de semana y días festivos la cifra suele llegar a 16. CON FUNDAMENTO 6 “Mujer tejiendo vida” El nombre del modelo es I´x Kem, traducido del idioma Kaqchikel como “Mujer tejiendo vida”, y representa la lucha constante de las féminas por salir adelante y construir su futuro.La sede está en la 11 avenida “A” 11-47 zona 7, La Verbena, y funciona todos los días, las 24 horas, con servicios completamente gratis. Fue inaugurada el 8 de marzo de 2021, en el marco del Día Internacional de la Mujer, menos de dos meses después de que 16 instituciones suscribieran un acuerdo para garantizar la asistencia oportuna a la población femenina en un solo lugar.La licenciada Lucrecia Vásquez de Cáceres, titular de la Secretaría de la Mujer, del MP, añade que la medida obedece a la necesidad de asistir a uno de los sectores más vulnerables de la sociedad y la que más sufre a causa de delitos contra su integridad física y emocional.“Es un modelo que rompe los esquemas tradicionales de atención a víctimas de la violencia contra la mujer. Es único en América Latina en el cual convergen múltiples instituciones para atender a la mujer de forma digna y rápida en todos los servicios”, apunta.El MAIMI cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por psicólogas, trabajadoras sociales, médicas y fscales. Las mujeres tienen acceso a servicios legales, sociales, de salud, educación, empoderamiento social y económico. Los casos se investigan de forma inmediata para proporcionar medidas de protección.Durante los tres años de funcionamiento del MAIMI, 32,273 mujeres han tocado sus puertas, y solo en diez meses de 2024 la cifra alcanzó 8,371.El MAIMI está integrado por seis ministerios del Organismo Ejecutivo (Economía, Educación, Gobernación, Salud Pública y Asistencia Social, Trabajo y Previsión Social, y Desarrollo Social) Organismo Judicial, Ministerio Público, Procuraduría General de la Nación, Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala, Instituto de la Defensa Pública Penal, Instituto de la Víctima, Instituto Guatemalteco de Migración, Municipalidad de Guatemala y Defensoría de la Mujer Indígena. RESUMEN Palabras clave: abuso, abuso sexual infantil, vulnerabilidad, daño psicológico, NNA. Keywords: abuse, child sexual abuse, vulnerability, psychological damage, children. El tema del daño psicológico que sufren los niños, niñas y adolescentes –NNA- que han sido víctimas de violencia sexual en territorio guatemalteco, es una problemática social de categoría grave que además se caracteriza por ser un acto violento multifacético, no solamente por las acciones, sino por la variedad de efectos psicológicos que pueden evolucionar hacia comportamientos inadecuados y en casos extremos psicopatológicos. Además, debe sumarse el contexto pericial, el cual se debe a que el daño causado a la psique en una de las poblaciones más vulnerable como la niñez, es uno de los objetivos más solicitados por autoridad competente. Dada la situación anterior, este trabajo busca plantear lo fundamental que es la preparación del perito profesional en psicología forense, reforzar la importancia del ejercicio pericial en la calidad y cumplimiento de estándares científcos para que el dictamen pericial tenga el fundamento específco y por consiguiente prepararse en la oratoria forense. Para ello la evaluación practicada debe hacerse con conocimiento de una entrevista centrada en los niños, niñas y adolescentes, con conocimiento de las dinámicas abusivas y del proceso de psicodesarrollo, lo que facilita responder con claridad a la pregunta psicolegal. CON FUNDAMENTO VALORACIÓN DEL DAÑO PSICOLÓGICO EN NIÑOS, NIÑAS Y ADOLESCENTES VÍCTIMAS DE VIOLENCIA SEXUAL EN EL CONTEXTO GUATEMALTECO Diálogo ForenseNúm. 10 , Vol. 5, 2024ISSN: 2789-8458 Erick Alexander Barrera Lima Psicología ForenseInstituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF- eabarrera@inacif.gob.gt Claudia Lisseth Castañeda Villeda Psicología ForenseInstituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF- ccastaneda@inacif.gob.gt Mayra Lisbeth Velásquez Trujillo Psicóloga Consejería Clínica e IntervenciónPsicosocial, Trabajador Independiente aryamlis@gmail.com Recibido: 1/09/2023Aceptado: 8/10/2024 En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente.
“Nuestra misión es atender con sentido humano, prontitud y respeto a la dignidad de cada persona”, expresa la doctora Yojaira del Rosario Citá Leiva, coordinadora del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF- en el Modelo de Atención Integral para las Mujeres Víctimas de Violencia I´x Kem –MAIMI-.La profesional de las ciencias forenses es una de los cinco médicos especialistas del INACIF asignados para auxiliar a la población en la sede del MAIMI, un sistema de atención inmediata e integral creado para dar respuesta diferenciada y efciente mediante la coordinación interinstitucional, con la intención de mejorar los mecanismos de investigación criminal.“Somos un eslabón fundamental en la cadena de servicio, porque aportamos el dictamen pericial que es clave en los procesos. Por ello, hacemos las evaluaciones lo más pronto posible. Trabajamos con empatía y le damos el tiempo adecuado a las personas para que se desahoguen”, destaca la doctora Citá Leiva.Detalla que para cumplir con esa misión están organizados en turnos rotativos de 8 horas, lapsos en los que reciben las denuncias que llegan directamente al MAIMI y también de las fscalías municipales del Ministerio Público –MP- en el área metropolitana. En promedio asisten a 14 personas, aunque los fnes de semana y días festivos la cifra suele llegar a 16. “Mujer tejiendo vida” El nombre del modelo es I´x Kem, traducido del idioma Kaqchikel como “Mujer tejiendo vida”, y representa la lucha constante de las féminas por salir adelante y construir su futuro.La sede está en la 11 avenida “A” 11-47 zona 7, La Verbena, y funciona todos los días, las 24 horas, con servicios completamente gratis. Fue inaugurada el 8 de marzo de 2021, en el marco del Día Internacional de la Mujer, menos de dos meses después de que 16 instituciones suscribieran un acuerdo para garantizar la asistencia oportuna a la población femenina en un solo lugar.La licenciada Lucrecia Vásquez de Cáceres, titular de la Secretaría de la Mujer, del MP, añade que la medida obedece a la necesidad de asistir a uno de los sectores más vulnerables de la sociedad y la que más sufre a causa de delitos contra su integridad física y emocional.“Es un modelo que rompe los esquemas tradicionales de atención a víctimas de la violencia contra la mujer. Es único en América Latina en el cual convergen múltiples instituciones para atender a la mujer de forma digna y rápida en todos los servicios”, apunta.El MAIMI cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por psicólogas, trabajadoras sociales, médicas y fscales. Las mujeres tienen acceso a servicios legales, sociales, de salud, educación, empoderamiento social y económico. Los casos se investigan de forma inmediata para proporcionar medidas de protección.Durante los tres años de funcionamiento del MAIMI, 32,273 mujeres han tocado sus puertas, y solo en diez meses de 2024 la cifra alcanzó 8,371.El MAIMI está integrado por seis ministerios del Organismo Ejecutivo (Economía, Educación, Gobernación, Salud Pública y Asistencia Social, Trabajo y Previsión Social, y Desarrollo Social) Organismo Judicial, Ministerio Público, Procuraduría General de la Nación, Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala, Instituto de la Defensa Pública Penal, Instituto de la Víctima, Instituto Guatemalteco de Migración, Municipalidad de Guatemala y Defensoría de la Mujer Indígena. CON FUNDAMENTO 7 The issue of psychological damage sufered by children and adolescents who have been victims of sexual violence in Guatemalan territory is a serious social problem that is also characterized by being a multifaceted violent act, not only by the actions, but by the variety of psychological efects that can develop into inappropriate behaviors and, in extreme cases, psychopathological. In addition, the expert context must be added, this is because the damage caused to the psyche in one of the most vulnerable populations, such as children, is one of the most requested objectives by the competent authority. Given the above situation, this work seeks to raise the fundamental nature of the preparation of the professional expert in forensic psychology, to reinforce the importance of the expert exercise in the quality and compliance with scientifc standards so that the expert opinion has the specifc foundation and therefore to prepare in forensic oratory. To do this, the evaluation carried out must be done with information from an interview focused on children and adolescents, with knowledge of the abusive dynamics and the psych development process, which makes it easier to clearly answer the psycholegal question.Los niños, niñas y adolescentes –NNA- son una población especialmente vulnerable, a diferencia de los adultos, ya que presentan una marcada asimetría en términos de edad, conocimiento y experiencia, lo que los coloca en un mayor riesgo frente a situaciones de maltrato, daño, discriminación y menosprecio, sufrir un menoscabo de su integridad en el ámbito sexual. En Guatemala se agrava la situación por patrones culturales arraigados, particularmente en áreas donde la pobreza es extrema. Guatemala presenta elevados índices de delitos de índole sexual dirigidos contra los NNA. Durante el 2023, según estadísticas del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF-, se realizaron reconocimientos médicos legales en casos de violencia sexual entre las edades de un año a catorce años de sexo masculino 454 y mujeres de esa misma edad 3,676 (INACIF, 2023). Estos actos de acuerdo con la literatura del comportamiento, mayoritariamente tienen lugar en el entorno familiar, estableciendo una dinámica en la que el perpetrador, valiéndose de la vulnerabilidad inherente del NNA, induce gradualmente hacia situaciones abusivas, utiliza engaños para lograrlo e insta a las víctimas a mantener en secreto estas acciones.Las conductas abusivas sobre la población NNA se pueden dar en varios espacios, como la escuela u otros entornos comunitarios, en los cuales los adultos tienden a tener la ventaja. Sin embargo, el daño psicológico se agrava cuando el agresor es una persona cercana al entorno familiar, o cuando al revelar los hechos no se le cree a la víctima, se le culpabiliza o critica, produciendo la pérdida de la capacidad para confar en sí misma y en los demás. La historia refeja cómo durante años se ha colocado en tela de juicio la revelación hecha por niñez y adolescencia, lo cual casuísticamente para quienes redactan este material ha podido identifcarse en los relatos obtenidos, en el que aún con cambios comportamentales, señales de sufrimiento (signos y síntomas), las consecuencias causadas dentro del seno familiar, el medio social duda de lo que sucede, la exposición a constantes entrevistas, contribuye al fenómeno de retractación, esto desde la praxis es respaldado por teóricos han estudiado el tema, y es un punto crítico que también debe analizarse como parte de un efecto psico-emocional que intensifca el dolor.Es esencial resaltar que la comprensión del abuso sexual y la valoración del daño psicológico se lleve a cabo por expertos en la materia. En Guatemala, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses -INACIF- desempeña un papel importante en este espacio. Para minimizar la revictimización, se requiere contar con herramientas específcas aplicables al contexto guatemalteco, que permitan una explicación exhaustiva de las consecuencias de los actos abusivos, tanto intencionales como negligentes, y presentar de manera sólida los argumentos a los juristas. El proceso de evaluación debe basarse en métodos como la entrevista, observación y evaluaciones mentales, los cuales deben integrarse coherentemente en un manual, ABSTRACT INTRODUCCIÓN protocolo o guía de procedimiento. En este documento se pueden incorporar instrumentos complementarios utilizados por los profesionales con competencias en intervenciones oportunas y un amplio conocimiento en desarrollo de etapas psicoevolutivas y psicopatología infantil, lo que permitirá identifcar las respuestas psicológicas según la fase de desarrollo de los NNA. Basado en lo anterior, se describirá el fenómeno del abuso sexual infantil y los criterios clínicos que los profesionales de la psicología, principalmente peritos de psicología forense del INACIF deben considerar al evaluar y emitir pronunciamientos relacionados con el daño psicológico, toda vez son los profesionales que tienen la competencia para identifcar y explicar dentro del dictamen pericial, el mismo que deberá ser ratifcado en audiencia de debate.En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 2-9
“Nuestra misión es atender con sentido humano, prontitud y respeto a la dignidad de cada persona”, expresa la doctora Yojaira del Rosario Citá Leiva, coordinadora del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF- en el Modelo de Atención Integral para las Mujeres Víctimas de Violencia I´x Kem –MAIMI-.La profesional de las ciencias forenses es una de los cinco médicos especialistas del INACIF asignados para auxiliar a la población en la sede del MAIMI, un sistema de atención inmediata e integral creado para dar respuesta diferenciada y efciente mediante la coordinación interinstitucional, con la intención de mejorar los mecanismos de investigación criminal.“Somos un eslabón fundamental en la cadena de servicio, porque aportamos el dictamen pericial que es clave en los procesos. Por ello, hacemos las evaluaciones lo más pronto posible. Trabajamos con empatía y le damos el tiempo adecuado a las personas para que se desahoguen”, destaca la doctora Citá Leiva.Detalla que para cumplir con esa misión están organizados en turnos rotativos de 8 horas, lapsos en los que reciben las denuncias que llegan directamente al MAIMI y también de las fscalías municipales del Ministerio Público –MP- en el área metropolitana. En promedio asisten a 14 personas, aunque los fnes de semana y días festivos la cifra suele llegar a 16. “Mujer tejiendo vida” El nombre del modelo es I´x Kem, traducido del idioma Kaqchikel como “Mujer tejiendo vida”, y representa la lucha constante de las féminas por salir adelante y construir su futuro.La sede está en la 11 avenida “A” 11-47 zona 7, La Verbena, y funciona todos los días, las 24 horas, con servicios completamente gratis. Fue inaugurada el 8 de marzo de 2021, en el marco del Día Internacional de la Mujer, menos de dos meses después de que 16 instituciones suscribieran un acuerdo para garantizar la asistencia oportuna a la población femenina en un solo lugar.La licenciada Lucrecia Vásquez de Cáceres, titular de la Secretaría de la Mujer, del MP, añade que la medida obedece a la necesidad de asistir a uno de los sectores más vulnerables de la sociedad y la que más sufre a causa de delitos contra su integridad física y emocional.“Es un modelo que rompe los esquemas tradicionales de atención a víctimas de la violencia contra la mujer. Es único en América Latina en el cual convergen múltiples instituciones para atender a la mujer de forma digna y rápida en todos los servicios”, apunta.El MAIMI cuenta con un equipo multidisciplinario integrado por psicólogas, trabajadoras sociales, médicas y fscales. Las mujeres tienen acceso a servicios legales, sociales, de salud, educación, empoderamiento social y económico. Los casos se investigan de forma inmediata para proporcionar medidas de protección.Durante los tres años de funcionamiento del MAIMI, 32,273 mujeres han tocado sus puertas, y solo en diez meses de 2024 la cifra alcanzó 8,371.El MAIMI está integrado por seis ministerios del Organismo Ejecutivo (Economía, Educación, Gobernación, Salud Pública y Asistencia Social, Trabajo y Previsión Social, y Desarrollo Social) Organismo Judicial, Ministerio Público, Procuraduría General de la Nación, Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala, Instituto de la Defensa Pública Penal, Instituto de la Víctima, Instituto Guatemalteco de Migración, Municipalidad de Guatemala y Defensoría de la Mujer Indígena.Los niños, niñas y adolescentes –NNA- son una población especialmente vulnerable, a diferencia de los adultos, ya que presentan una marcada asimetría en términos de edad, conocimiento y experiencia, lo que los coloca en un mayor riesgo frente a situaciones de maltrato, daño, discriminación y menosprecio, sufrir un menoscabo de su integridad en el ámbito sexual. En Guatemala se agrava la situación por patrones culturales arraigados, particularmente en áreas donde la pobreza es extrema. Guatemala presenta elevados índices de delitos de índole sexual dirigidos contra los NNA. Durante el 2023, según estadísticas del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala –INACIF-, se realizaron reconocimientos médicos legales en casos de violencia sexual entre las edades de un año a catorce años de sexo masculino 454 y mujeres de esa misma edad 3,676 (INACIF, 2023). Estos actos de acuerdo con la literatura del comportamiento, mayoritariamente tienen lugar en el entorno familiar, estableciendo una dinámica en la que el perpetrador, valiéndose de la vulnerabilidad inherente del NNA, induce gradualmente hacia situaciones abusivas, utiliza engaños para lograrlo e insta a las víctimas a mantener en secreto estas acciones.Las conductas abusivas sobre la población NNA se pueden dar en varios espacios, como la escuela u otros entornos comunitarios, en los cuales los adultos tienden a tener la ventaja. Sin embargo, el daño psicológico se agrava cuando el agresor es una persona cercana al entorno familiar, o cuando al revelar los hechos no se le cree a la víctima, se le culpabiliza o critica, produciendo la pérdida de la capacidad para confar en sí misma y en los demás. La historia refeja cómo durante años se ha colocado en tela de juicio la revelación hecha por niñez y adolescencia, lo cual casuísticamente para quienes redactan este material ha podido identifcarse en los relatos obtenidos, en el que aún con cambios comportamentales, señales de sufrimiento (signos y síntomas), las consecuencias causadas dentro del seno familiar, el medio social duda de lo que sucede, la exposición a constantes entrevistas, contribuye al fenómeno de retractación, esto desde la praxis es respaldado por teóricos han estudiado el tema, y es un punto crítico que también debe analizarse como parte de un efecto psico-emocional que intensifca el dolor.Es esencial resaltar que la comprensión del abuso sexual y la valoración del daño psicológico se lleve a cabo por expertos en la materia. En Guatemala, el Instituto Nacional de Ciencias Forenses -INACIF- desempeña un papel importante en este espacio. Para minimizar la revictimización, se requiere contar con herramientas específcas aplicables al contexto guatemalteco, que permitan una explicación exhaustiva de las consecuencias de los actos abusivos, tanto intencionales como negligentes, y presentar de manera sólida los argumentos a los juristas. El proceso de evaluación debe basarse en métodos como la entrevista, observación y evaluaciones mentales, los cuales deben integrarse coherentemente en un manual, CON FUNDAMENTO 8 protocolo o guía de procedimiento. En este documento se pueden incorporar instrumentos complementarios utilizados por los profesionales con competencias en intervenciones oportunas y un amplio conocimiento en desarrollo de etapas psicoevolutivas y psicopatología infantil, lo que permitirá identifcar las respuestas psicológicas según la fase de desarrollo de los NNA. Basado en lo anterior, se describirá el fenómeno del abuso sexual infantil y los criterios clínicos que los profesionales de la psicología, principalmente peritos de psicología forense del INACIF deben considerar al evaluar y emitir pronunciamientos relacionados con el daño psicológico, toda vez son los profesionales que tienen la competencia para identifcar y explicar dentro del dictamen pericial, el mismo que deberá ser ratifcado en audiencia de debate. CONTENIDO Niñez y vulnerabilidad En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 3-9
CON FUNDAMENTO 9 En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. Batres (1997) sostiene que, si las conductas están relacionadas con el cuidado, protección y guía del NNA, podrían compartir características con el incesto, que lamentablemente en el contexto legal guatemalteco no está tipifcado como delito; sin embargo, según el Código Penal, Decreto 17-73, artículo 174, esto es un agravante a la pena, ya que es una conducta intrínsecamente aberrante que aumenta el daño en la víctima. En cualesquiera de los dominios, ya sea extrafamiliar o intrafamiliar, pueden darse variadas conductas con signifcación sexual, siendo las más habituales según Fuentes (2012) y Batres (1997) las siguientes:Tocamientos de genitales del niño o niña por parte del abusador.Exhibición de los genitales por parte del abusador al NNA.Exposición de material de abuso infantil (revistas, películas, fotos, videos en redes sociales o aplicaciones).Tocamientos de otras zonas del cuerpo por parte del abusador.Penetración vaginal o anal, o intento de ella, ya sea con sus propios genitales, con otras partes del cuerpo (dedos), o con objetos, por parte del abusador.Contacto bucogenital entre el abusador y el niño.Utilización del niño o niña en la elaboración de material pornográfco (fotos, películas).Tomando en cuenta las conductas descritas, es importante resaltar que en el abuso sexual además de haber contacto sexual también se da el abuso de poder. Se caracteriza por la falta de consentimiento del NNA, a menudo involucrando conductas de amenaza, fuerza física, manipulación y una posición de total desventaja para el NNA, lo que provoca miedo, desconfanza y sentimientos de desamparo.Según Stamateas (2017), entre las dinámicas abusivas o acciones de índole sexual en contra de los NNA, se suele dar el síndrome de acomodación al abuso sexual infantil -SAASI-. Este síndrome representa, de cierta manera, una modalidad de maltrato activo hacia personas menores de edad. El SAASI comprende cinco etapas:El secreto: el niño es manipulado, engañado, seducido, coaccionado o amenazado para mantener el secreto acerca del abuso sexual del que es objeto. Antes de esto, el adulto brinda un escenario de confanza para luego utilizar expresiones verbales, amenazas o chantajes que logran que el NNA mantenga en secreto lo que sucede por miedo, culpabilidad y vergüenza.La desprotección o desamparo: el NNA experimentará sentimientos de traición, desprotección o confusión, debido a que la persona que lleva a cabo el abuso suele pertenecer al círculo de confanza del menor. El NNA se sentirá tan vulnerable, indefenso e impotente, que desde sus propias capacidades cognitivas y afectivas se adaptará a la situación de abuso.La tercer etapa es el entrampamiento y acomodación: en esta fase los NNA desean no ser abusados o agredidos. La víctima se siente culpable por no evitar el abuso. Esta culpa es patológica y está impuesta por el agresor y con las limitadas capacidades que tiene la víctima entonces valida todas las palabras, escenarios y expresiones que el agresor le impone. Por miedo a que le ocurra algo a su familia, sigue callando y opta por acomodarse al abuso. En algunos casos se dan situaciones que el NNA toma como válidas o confrma de manera equivocada lo que el agresor le impone.La revelación tardía no convincente: de acuerdo con la literatura y la experiencia directa como peritos en psicología forense, es importante reconocer que la revelación de casos de abuso sexual infantil no ocurre de forma inmediata en todos los casos. En algunas ocasiones según los relatos brindados, la víctima vence el temor y logra revelar el hecho de manera tardía. Alternativamente, también existe la posibilidad de que el abuso sea descubierto por un tercero como maestros, hermanos, tíos, o incluso personas en el entorno eclesiástico. La retractación: en la mayoría de los casos, especialmente en el contexto guatemalteco, suele ocurrir debido a la falta de apoyo. El NNA llega a comprender que las amenazas del abusador eran reales; como resultado, se retracta de la acusación para evitar represalias adicionales. Durante este periodo se incrementan los sentimientos de ....... I.II.III.IV.V. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 4-9
CON FUNDAMENTO 10 En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. culpabilidad, vergüenza, temor, confusión y desamparo. El NNA se siente angustiado y opta por afrmar en declaraciones posteriores o en entrevistas que lo previamente expresado no sucedió, o incluso sugiere que pudo ser producto de su imaginación o infuencia de los medios de comunicación. En este momento el agresor aprovecha la situación y continúa intensifcando los actos de abuso sexual hacia el NNA. Valoración del daño psicológico El daño desde el momento cuando un niño, niña o adolescente es atacado presentará un lastre que impide su funcionamiento armónico, se intensifca aún más con conficto el interior en la parte afectiva emocional de la persona y por la forma en que sea percibido por su medio social.El daño psicológico es un término complejo en la actualidad, debido a que si bien autores han logrado establecerlo como todas aquellas consecuencias psicológicas que se derivan de una acción con capacidad de menoscabar a una persona, en el ámbito jurídico es derivado de la victimización. El empirismo bajo la panorámica del experto sostiene que la mayor parte de los casos tienen los mismos denominadores, en esto cada perito especializado podrá explicar con claridad las experiencias violentas de las personas y sus consecuencias, basado en las historias recolectadas, la etapa psicoevolutiva de la persona evaluada, antecedentes, factores protectores y de vulnerabilidad que en conjuntos infuirán en la evolución sintomatológica, para ello el respaldo teórico de autores como el profesor Echeburúa. El daño psicológico según Echeburúa (2004):…se refere, por un lado, a las lesiones psíquicas agudas producidas por un delito violento, que, en algunos casos, pueden remitir con el paso del tiempo, el apoyo social o un tratamiento psicológico adecuado; y, por otro, a las secuelas emocionales que persisten en la persona de forma crónica, como consecuencia del suceso sufrido y que interferen negativamente en su vida cotidiana (p. 1). Las secuelas emocionales y daño al proyecto de vida De acuerdo con Echeburúa, De Corral y Amor (2004) las secuelas emocionales se referen a la estabilización del daño psíquico o psicológico, es decir, a la cronifcación o discapacidad permanente que no permite la adecuada readaptación a la vida cotidiana y afecta su funcionalidad en el mundo que le rodea. “Se trata, por tanto, de una alteración irreversible en el funcionamiento psicológico habitual o, dicho en términos legales más imprecisos conceptualmente, de un menoscabo de la salud mental.”(Echeburúa, De Corral y Amor, 2004, p. 5).En el contexto guatemalteco y basándonos en la experiencia del perito en psicología forense, las secuelas psicológicas más frecuentes en las víctimas de agresiones o violación sexual se manifestan a través de diversas conductas. Entre estas se incluyen comportamientos de evitación, enuresis, ansiedad, llanto espontáneo y sin razón aparente, bajo rendimiento escolar, repetición de conductas agresivas, conductas sexualizadas y, en el peor de los casos, intentos de suicidio. Otro aspecto que el perito en psicología debe considerar es el impacto en el proyecto de vida de estas víctimas. A menudo es discutible si es posible determinar el daño a este proyecto, especialmente si no se conocen los planes futuros y expectativas, por lo que no podría ser factible hacer una apreciación puntual acerca de ellos. No obstante, es innegable que todo abuso sexual en contra de un NNA implicará un desequilibrio a su seguridad emocional lo que difcultará que la autorrealización sea fácilmente alcanzable. Si bien, cada sujeto es dinámico, cada persona se adapta de diferente manera a las situaciones adversas (lo que se conoce como capacidad de resiliencia), los actos sexuales en contra de NNA dejarán una huella en sus emociones, pensamientos y forma de ver la vida, así como en su seguridad y confanza. Según la teoría del psicotrauma, conforme vaya viviendo las diferentes etapas de su vida ante estímulos mínimos ya sea de manera consciente o inconsciente, se activarán reacciones emocionales asociadas al abuso sufrido. Por lo tanto, al iniciar relaciones sociales, de pareja o contacto sexual puede surgir sintomatología que corresponde a secuelas del daño que se instaló y en ese instante se suma como daño al proyecto de vida. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 5-9
Desde la propia experiencia como peritos en psicología, al evaluar víctimas con antecedentes de abuso sexual en la infancia, se ha observado una mayor probabilidad de que sufran trastornos emocionales como depresión, ansiedad, junto a difcultades en áreas como el autoconcepto y la autoestima. Además, suelen enfrentar problemas en sus relaciones sexuales, difcultades para vincularse emocionalmente, difcultades para mantener relaciones estables. Estos desafíos se manifestan en pensamientos negativos y en algunas ocasiones llegando a extremos la conducta suicida puede aparecer, aunque esto no es un patrón. Si existió la oportunidad de someterse a un proceso psicoterapéutico no es garante de un restablecimiento emocional en su totalidad, quedarán máculas del hecho violento, pero sin que lastimen a la persona.Esto confrma entonces que el desarrollo de un proyecto de vida satisfactorio sí, se ve afectado considerablemente. Encuadre de entrevista forense Es importante destacar que en una primera instancia, el perito en psicología forense del INACIF conocerá el caso en cuestión, incluyendo el delito que se está investigando, el contexto en el que ocurrió la acción y cómo se llegó a la revelación del hecho que motivó la denuncia. Posteriormente, la entrevista tomará el rumbo de acuerdo con las características específcas del NNA involucrado. El peritaje obliga al experto a conocer las etapas del desarrollo cognitivo del NNA, así como establecer su funcionamiento en lo que a salud mental se refere. Debe contemplar además la capacidad narrativa y su habilidad para expresar emociones; lograr esto es un reto, lo que hace esencial la interpretación adecuada de las expresiones y emociones del niño. Tomando en cuenta estos aspectos se indagará acerca de la historia a través de una entrevista semiestructurada y de narrativa libre, con el propósito de obtener los criterios necesarios para valorar el daño sufrido.Luego de haber realizado la entrevista psicológica forense, en algunos casos es necesario entrevistar a los responsables del NNA. Estas personas son quienes tienen un conocimiento más íntimo de la presunta víctima y han observado su conducta y la forma de expresar sus emociones. En la medida de lo posible se evitará afectar la integridad del relato y asegurar que la entrevista al adulto se realice con el propósito de ampliar información y confrmar la hipótesis acerca de la existencia del daño psicológico. En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. CON FUNDAMENTO 11 Cuadro1. Criterios clínicos para la valoración del daño psicológico según su etapa. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 6-9
En primer lugar, es fundamental establecer una defnición legal de niñez y adolescencia. De acuerdo con el artículo 2 de la Ley de Protección Integral de la Niñez y Adolescencia, “Se considera niño o niña a toda persona desde su concepción hasta que cumple trece años de edad, y adolescente a toda aquella desde los trece hasta que cumple dieciocho años de edad”.Estas poblaciones son consideradas vulnerables, un término que de acuerdo con la Real Academia Española (2019), se refere a la capacidad de “…ser herido o recibir lesión, física o moralmente”. Feito (2007) señala que la vulnerabilidad implica fragilidad y la posibilidad de sufrir daño, tanto físico como emocional. En esencia, ser vulnerable conlleva ser susceptible de padecer situaciones adversas, como enfermedades, y estar expuesto a riesgos físicos y emocionales. Además, también denota la predisposición a ser persuadido, así como la posibilidad de ser infuenciado o afectado por factores externos. Esto implica no tener un control absoluto de una situación, no estar en una posición de poder o, al menos, que la capacidad de ejercer poder se vea comprometida. En el mismo contexto, es crucial reconocer como la vulnerabilidad de la niñez y adolescencia se entrelaza con la noción de violencia sexual. La Organización Mundial de la Salud (2010), defne la violencia sexual como:La tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de ésta con la víctima, en cualquier ámbito.La vulnerabilidad inherente a etapas de vida temprana incrementa la susceptibilidad a sufrir daños, incluida la violencia sexual en todas sus manifestaciones. Por lo tanto, es esencial abordar la protección y el apoyo de estas poblaciones de manera integral, considerando tanto su vulnerabilidad como la complejidad de la violencia sexual. Es necesario hacer mención que la jurisprudencia guatemalteca contempla las leyes pertinentes para ser aplicadas en su debido momento, aunque existe una falla enorme en lo que respecta al incesto. Dinámicas de las conductas abusivas En el contexto de conductas abusivas, según Intebi (2008), los abusos sexuales a NNA pueden manifestarse de diferentes maneras. En algunos casos, cuando el agresor tiene vínculos familiares cercanos, las acciones ocurren de manera abrupta, sin que previamente se hayan dado señales de comportamiento abusivo o amenazas. Sin embargo, en la mayoría de los casos estudiados es más común observar conductas de seducción y engaño. Estas tácticas buscan ganar la confanza del NNA, para luego dirigir las acciones abusivas a través de conductas sexualizadas, juegos de confanza, acercamientos con aparente justifcación de hábitos de higiene, encaminados a agredir sexualmente. CON FUNDAMENTO 12 En el cuadro 1 se muestran algunos de los criterios clínicos (signos y síntomas) que son obtenidos de la narrativa del niño y de la información que el encargado proporcione (Intebi, 2008). En muchos de los casos evaluados se ha podido identifcar que los NNA no describen, no detallan o no refejan signología asociados a las acciones abusivas. Este silencio o la poca habilidad para verbalizar o expresar sus emociones dependen del contexto del niño, de la crianza, de la instrucción escolar o socioemocional, no obstante, si se tiene un relato abundante en detalles, hay una historia o relatos previos, entonces es factible valorar el relato del niño y establecer criterios de daño psicológico.La evaluación del daño psicológico no debe basarse únicamente en la observación de la sintomatología presentada al momento de la pericia. Debido a que el impacto del daño psicológico se extiende a varias etapas de la vida del NNA y considerando su naturaleza integral y dinámica, este afecta en sus dimensiones cognitivas, afectivas y conductuales. Por esta razón, resulta crucial formular preguntas que aborden sus pensamientos, emociones y conductas posteriores a las experiencias abusivas. Si se lleva a cabo una entrevista exhaustiva y bien estructurada entonces se obtendrán resultados y criterios sufcientes para poder obtener estos datos. Es fundamental recordar que la entrevista psicológica forense está enfocada en una ruta cognitiva. Por lo tanto, cuanta más información se solicite a través de la evocación de recuerdos y detalles del suceso, mayor cantidad de información acerca de la sintomatología se podrá obtener. Cuadro 2. Indicadores en la esfera cognitiva, emocional y conductual para valorar el daño. Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 7-9
En el cuadro 2 se presentan efectos diferenciados en área cognitiva, emocional y conductual, en otras palabras, qué piensa, qué siente y cómo actúa el niño, niña o adolescente ante una circunstancia que le causa malestar. Además de ello, en posibles víctimas de abuso sexual deben analizarse la presencia de indicadores vegetativos, esto quiere decir reacciones corporales asociadas a las conductas abusivas. A continuación, se detallan: Alteraciones en el sueño: como exceso de somnolencia o difcultades para dormir.Cambios en el apetito y el peso: pueden manifestarse como aumento o disminución del apetito y peso corporal.Niveles de energía: fatiga que interfere con el desempeño laboral o escolar.Variabilidad diurna del estado de ánimo: tendencia de sentirse mejor en determinados momentos del día.Quejas constantes de dolores somáticos.La manifestación de estos síntomas puede variar según la edad cronológica del niño. Por lo tanto, resulta necesario contar con la información del encargado o tutor, o incluso de informes psicológicos donde se identifque las reacciones conductuales observadas en el niño, tal como se ha descrito anteriormente.En última instancia, para llevar a cabo una evaluación completa del daño psicológico y proporcionar una descripción uniforme que se ajuste al área de psicología forense del INACIF, se presenta la siguiente matriz (cuadro 3), la que identifca las respuestas psicológicas evaluadas en función de su presencia, intensidad, tiempo, etapa psicoevolutiva y el hecho al que se atribuye la afectación, resaltando el juicio clínico del perito y la adecuada aplicación de los instrumentos en este proceso. ..... Cuadro 3. Temporalidad, indicadores de daño psicológico Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 8-9 CON FUNDAMENTO 13
SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES CONCLUSIÓN REFERENCIAS Batres, G. (1997). Del ultraje a la esperanza. Tratamiento de las secuelas del incesto. ILANUD. Programa Regional deCongreso de la República de Guatemala. (2003). Decreto Número 27-2003, Ley de Protección Integral de la Niñez Congreso de la República de Guatemala. (1973). Decreto Número 17-73, Código Penal. 30 de agosto de 1973. D. O.Congreso de la República de Guatemala. (2009). Decreto Número 9-2009, Ley Contra la Violencia Sexual, Echeburúa, E. (2004). Superar un Trauma. El tratamiento de las víctimas de sucesos violentos. Ediciones Pirámide.Echeburúa, E., De Corral, P y Amor, P. (2004). Evaluación del daño psicológico en las víctimas de delitos violentos. Feito, L. (2007). Vulnerabilidad. Anales del Sistema Sanitario de Navarra , 30(Supl. 3), 7-22.Fuentes, G. (2012). “Abuso sexual infantil intrafamiliar”: el abordaje desde el Trabajo social y la necesidad de unaIntebi, I. (2008). Valoración de sospechas de abuso sexual infantil. Colección Documentos Técnicos. Gobierno deInstituto Nacional de Ciencias Forenses de Guatemala. (2023). Portal de Estadísticas. Organización Mundial de la Salud. (2010). Violencia sexual en Latinoamérica y El Caribe: Análisisde datos secundarios Real Academia Española. (2019). Diccionario de la lengua española. https://dle.rae.es/vulnerable?m=form.Secretaría contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas -SVET- (2024). ¿Qué es violencia sexual? Stamateas, B. (9 de febrero de 2017). El síndrome de la acomodación. Capacitación contra la Violencia Doméstica. y Adolescencia. 18 de julio de 2003. D.O. No. 13.No. 1.Explotación y Trata de Personas. 20 de marzo 2009. D.O. No. 49. Psicopatología Clínica, Legal y Forense , 4, 227-244.http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1137-66272007000600002&lng=es&tlng=es.mirada interdisciplinaria. Margen: revista de trabajo social y ciencias sociales, (64), 1-56.Cantabria.https://www.inacif.gob.gt/estadisticasweb/evalmedicaspersonalizado.phphttps://www3.paho.org/hq/dmdocuments/2010/Violencia_Sexual_LAyElCaribe.pdfhttps://svet.gob.gt/violencia-sexual/https://www.lanacion.com.ar/opinion/el-sindrome-de-la-acomodacion-nid1983065/ Erick Barrera, Claudia Castañeda y Mayra Velásquez / Revista Científca Diálogo Forense / Núm. 10, Vol. 5 /julio-diciembre 2024/ pp. 9-9 Establecer la presencia de daño psicológico debe apegarse al conocimiento, la experiencia del profesional todo adherido a la cientifcidad, la cual debe subordinarse también a la legislación guatemalteca, así como la pertinencia cultural, recordar que también deben observarse aquellos síntomas que llamaremos invisibles, porque es el profesional que entiende del psiquismo humano quien tendrá los elementos en sus manos para su verifcación. Una experiencia vívida que puede cambiar el rumbo de la vida y limitar las oportunidades de un niño, niña y adolescente, conlleva a un modelo de trabajo bajo una dimensión integral, véase como la interacción de los seres humanos con diferentes variables. CON FUNDAMENTO 14